La rica heredera tiene que hacer frente, cada día, a grandes obstáculos...
Por supuesto, Paris no pudo negarse y, sorprendida a la vez que encantada por la situación de ser el centro de atención, firmó la imagen a la que añadió el dibujo de un corazón. Eso sí, Paris hace suyo el lema de "antes muerta que sencilla" y se niega a quitarse las gafas de sol por si el reflejo de su belleza sobre el papel le deslumbra.
¡Ay, Paris!: hay momentos en los que ser rica, guapa, joven y no tener nada mejor que hacer es tan duro... ¿A que sí?
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