Cuando hablamos sobre salario emocional, es necesario clarificar que la motivación depende de cada persona y lasempresas no pueden dar “motivos” a sus colaboradores para ir y desempeñar lo mejor posible la actividad que realiza la persona. Las empresas sí pueden reforzar las buenas conductas y premiar los resultados alcanzados o generados por el personal, parte de ese esfuerzo e incentivo no monetario es el salario emocional.
El salario emocional puede definirse como la percepción tangible o intangible de gratificaciones que satisfacen necesidades personales, familiares y profesionales del Colaborador.
El salario emocional es parte del contrato psicológico entre empresa y empleado, ambas partes deciden de manera voluntaria a portar al balance emocional de cada uno, es por eso, que se promueve la lealtad, ética, moralidad, entre otros, ambas partes dirigen sus prácticas hacia una vivencia de integridad. Por el caso contrario, si la relación laboral no es saludable, se rompe ese contrato emocional por la falta de cumplimiento de alguna de las partes.
Por lo anterior, es necesario destacar que parte importante para impactar en las organizaciones este giro sobre el salario emocional, es que los colaboradores también se distingan con actitudes positivas, cambió de mentalidad, enfoque en resultados y tomar conciencia sobre el valor de su marca personal.
Existen 4 áreas importantes a considerar en el salario emocional:
1. Las condiciones físicas donde el colaborador ejecuta su trabajo, por sencillas que sean deben ser apropiadas en luz, ventilación y otros elementos importantes que permiten un ambiente agradable. (Teoría de Herzberg).
2. Clima laboral. Constantemente verificar que en el ambiente de trabajo se traspire el “glade” del propósito de la organización, principios (valores), buenas prácticas y actitudes positivas.
3. Satisfacción laboral. Se refiere a la felicidad que experimenta el empleado por su buen desempeño, entendiendo que su puesto agrega valor a la compañía.
4. Equilibrio entre trabajo y familia. Es importante destacar que toda persona necesita un balance en las áreas de su vida para que de esa forma pueda entender la diferencia entre lo importante y lo urgente (administración del tiempo, Steven Covey).
A parte del salario emocional, el colaborador necesita devengar un salario monetario a las atribuciones del puesto y demanda. Es necesario ser competitivos en esta área. Algunas empresas cuando no pueden mejorar la remuneración, buscan aportar al empleado a través de víveres u otros incentivos.
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