Cuando estamos ansiosos nos resulta prácticamente imposible permanecer quietos, tendemos a exagerar los gestos o los tics, a fruncir el ceño o a mover nerviosamente las manos. Pero un trabajo publicado en la C añade una señal inesperada. Porque parece ser que las personas ansiosas tienen una tendencia a desviarse hacia el lado izquierdo cuando caminan. Como explica el coordinador del trabajo, el doctor Mario Weick, de la Universidad de Kent, en Inglaterra, la causa está en que el desasosiego afecta a la actividad del cerebro, que pone en estado de sobreexcitación al hemisferio derecho, el encargado de los movimientos del lado opuesto de nuestro cuerpo. El experimento consistió en vendar los ojos a varios voluntarios y pedirles que se desplazaran en una habitación hacia un objetivo que habían visto antes. Pues bien, aquellos que previamente presentaban agitación nerviosa, según habían registrado los expertos mediante varios test, tendían a terminar su recorrido a la izquierda de la meta.
Esta es la primera vez que los investigadores han establecido una clara relación entre un estado de inhibición y de ansiedad y la activación del lado derecho del cerebro.
El hallazgo podría ayudar, por ejemplo, en el tratamiento del síndrome de negligencia unilateral, que consiste en la falta de conciencia de un lado del espacio. Es decir, la persona afectada deja de atender el lado izquierdo de su cuerpo y el espacio que lo rodea. Aunque pueden seguir percibiendo sensaciones en la parte izquierda de su cuerpo, no les prestan atención. Se acompaña de disfunciones cognitivas y de comunicación, problemas de memoria, de atención y razonamiento.
Fuente: Revista Cognition
No hay comentarios.:
Publicar un comentario