Un hombre estuvo durante más de dos horas y media escalando la fachada de vidrio de la Torre Trump utilizando ventosas, y llegó hasta el 21er piso antes de ser detenido por policías y metido al edificio por una ventana.
El escalador tenía una mochila y utilizó un arnés y estribos de soga para sujetarse al rascacielos de 58 pisos ubicado en Manhattan.
Durante un largo rato, el escalador jugó al gato y al ratón en velocidad lenta con los policías, manteniéndose a distancia avanzando y retrocediendo metódicamente por la fachada y esquinas anguladas del edificio. Cuando los policías que lo atraparían más tarde rompieron una ventana ubicada arriba de su posición, tuvo que agacharse rápidamente para evitar ser golpeado por pedazos grandes de cristal que cayeron.
La persecución terminó justo después de las 6:30 de la tarde.
Mientras una multitud quedaba boquiabierta abajo en la calle, dos policías se inclinaron fuera del marco de la ventana a la que habían quitado el vidrio, sujetaron un brazo del escalador y su mochila, y lo jalaron bruscamente de sus estribos. Lo metieron por la ventana con la cabeza por delante y las piernas apuntando hacia el cielo.
La policía había colocado en el sitio enormes colchones inflados, pero no estaba claro si estaban suficientemente cerca del lugar donde estaba escalando el hombre como para protegerlo en caso de una caída.
La torre es sede de la oficina de campaña del candidato presidencial Donald Trump y de su imperio empresarial. Trump además vive ahí, aunque él estaba en Virginia por la tarde y se dirigiría a Florida para un acto de campaña en la noche.
Fuente: http://www.excelsior.com.mx/
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